En muchas ocasiones nos encontramos con empresarios que se hacen las siguientes preguntas ¿Cómo enfoco el futuro de mi pyme?, ¿Qué cambios debo plantear en mi organización?
Como consultores especializados en la gestión de la pyme, redactamos estos artículos con la esperanza de despertar alguna reflexión de utilidad, anotar algunas recomendaciones y problemas que observamos habitualmente en las pequeñas y medianas empresas.
Los problemas habituales en las pymes
Cuando las empresas sufren algún tipo de crisis, entre los efectos que provoca es el agravamiento de problemas y síntomas que ya se sufrían en el pasado. Empresarios y empresas de pequeña dimensión conviven habitualmente con inquietudes como:
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Las dificultades para conformar equipos de trabajo eficientes
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Las dificultades de delegación y concentración de funciones en la dirección y/o propiedad
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Un gerente o empresario multi-tasking y micro-gestiones
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La sensación de soledad en la toma de decisiones en todos los ámbitos de la empresa
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Sensación de no llegar a todo. Falta de tiempo para gestionar cuestiones importantes
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Ansiedad y ambientes laborales claramente mejorables
La calidad de vida del empresario
Además, el deterioro de la calidad de vida del empresario de estas pequeñas organizaciones, limita su motivación hacia el crecimiento de su proyecto empresarial. Este crecimiento, en muchas ocasiones, es clave para la eficiencia de las inversiones realizadas y modelo de negocio, pero se establece y se consigue, en decremento de su calidad de vida.
Todos estos problemas ya son viejos conocidos y enemigos contra los que luchamos en las consultoras como Iberdac desde hace muchos años, con un porcentaje de éxito muy elevado…..solo se precisa, como en otros muchos ámbitos de la vida, metodología de trabajo y tener claramente identificado el deseo y la voluntad de cambio.
Estos problemas, aún históricos en muchas pymes, afectan más que nunca cuando llega el periodo de "vacas flacas". Es en estos periodos cuando las organizaciones tendrán que abordar cambios profundos con el peor de los escenarios: complicados entornos sociales, económicos y emocionales… Por lo que, desde Iberdac entendemos que ¡ya!, ¡más que nunca!, se ha de trabajar y profundizar en una MEJOR GESTIÓN DEL TIEMPO DEL EMPRESARIO Y SU EQUIPO.
Dónde se me va el tiempo
Tiempo que, por desgracia, en muchas ocasiones se desperdicia o gestiona de forma ineficiente en:
- Tareas de bajo nivel de contribución que son fácilmente identificables e incluso susceptibles de ser eliminadas.
- Hábitos, costumbres, rutinas o manías que todos mantenemos en nuestro día a día y en todas las funciones de la organización:
"Se hizo siempre así"… "Cuando llegué a la empresa esto ya funcionaba así"… "Pensaba que era legalmente obligado"… "Lo dijo un asesor"… "Es que no me fio de mis sistemas informáticos"… "Si no lo hago yo, no lo hace nadie"… "No sé porque lo hacemos cada día"… "Responsabilidades que son de todos y otras que no son de nadie."
- La reticencia de las personas hacia el cambio.
Con alguno de estos aspectos, se convive en todas las organizaciones y especialmente en pequeñas y medianas empresas, penalizando la eficiencia y gestión del tiempo del empresario y sus colaboradores, envés de invertirlo en reflexionar y definir planes de acción para adaptar la empresa a los profundos cambios que ha sufrido el entorno, o incluso, reorganizarse para afrontar la nueva realidad.
Las claves para gestionar mejor el tiempo
Todos nos preguntamos …. ¿Cuáles son las principales claves para una mejor gestión y aprovechamiento del tiempo de la empresa y empresario? Las claves y soluciones son muchas, particulares en algunos casos, pero comunes para la mayoría de ellos. A destacar por su especial relevancia:
- MEDIR. ¿Cómo voy a tomar consciencia del problema que tengo si no tengo conciencia de donde va a parar mi tiempo?.
- PONER LÍMITES a la jornada y centrarse en los factores clave.
- SIMPLIFICAR procesos y CUMPLIR CON LOS PROCEDIMIENTOS de funcionamiento establecidos o eliminarlos. Estabilizar procesos y métodos de trabajo. No parchear continuamente la organización y sus dinámicas de trabajo. Erradicar soluciones informáticas que no solucionan ni simplifican nada, sino todo lo contrario.
- Centrarse en los OBJETIVOS…..por lo que se ha de implantar una cultura de objetivos sobre la dirección y organización en su conjunto.
- PLANIFICAR….huir de la improvisación. Una correcta gestión de la periodicidad de las tareas te ayudará a mantener el orden y las prioridades.
- Evitar los agotadores LADRONES DE TIEMPO: canales de comunicación triplicados, malas gestiones de reuniones, dinámicas de visitas, controles redundantes, atención permanente de las urgencias, dificultades y dudas continuas en la toma de decisiones, etc.
- Diferenciar lo IMPORTANTE de lo URGENTE.
- Un correcto DESCANSO y EJERCICIO FÍSICO.
Desde Iberdac, tras años de colaboración con la pyme le podemos ayudar a mejorar algunos de estos aspectos clave que le han de permitir mejorar su organización, su calidad de vida y la de las personas que le acompañan en su proyecto. Método de trabajo, imparcialidad, profesionalidad, experiencia y una visión externa le pueden ayudar a identificar aquellos aspectos que le penalizan personal y empresarialmente: su gestión del tiempo y la rentabilidad de su organización. El empresario ha de centrar su tiempo y esfuerzo en identificar las oportunidades que también le rodean……para ello, se precisa de reflexión, observación y tiempo, pero, sobre todo, tomar consciencia de que muchas cosas se pueden recuperar, pero no el tiempo perdido.
Ponte en contacto con nosotros y atenderemos tu caso particular sin ningún compromiso.
